El secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina, Pablo Micheli, hizo responsable al Gobierno por la tragedia ferroviaria en Once que provocó 50 muertos y más de 600 heridos. Ayer a la tarde dijo a ACTA que "la tríada que integra el gobierno nacional, la burocracia sindical y las empresas concesionarias conforman un cóctel letal".
Según Micheli, "los organismos del Gobierno que no controlan en qué gastan las empresas privadas los subsidios millonarios que reciben, la patota sindical que hace negociados en Ferrocarriles ante la vista gorda de las autoridades y las concesionarias que no invierten un peso, constituyen un triángulo mortal para los pasajeros de los trenes en la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano".
"Es una vergüenza, resulta que los muertos son siempre del mismo lado, de los trabajadores y el pueblo ¿Hasta cuándo? Las cosas no pasan por casualidad, son por causa de los irresponsables, de los que gobiernan sólo para salvarse y no cambian nada para mejor", bramó Micheli.
Tras cartón advirtió: "Ahora, como cada vez que se produce una tragedia como ésta, le echan la culpa al maquinista. Quieren cortar el hilo por lo más delgado y eludir responsabilidades. Si los compañeros denuncian la falta de inversión, negocios entre la empresa, el sindicato y el Gobierno le hacen el juego a la derecha. ¿Acaso Juan Pablo Schiavi, secretario de Transporte es de izquierda? ¿Por qué no se dejan de joder?, se indignó.
Schiavi ya debería haber renunciado y el Gobierno tiene que abocarse urgente a quitar las concesiones a estos empresarios inescrupulosos, meter presos a todos los funcionarios y sindicalistas que permiten la destrucción del sistema ferroviario y que la gente viaje como ganado. Debe volver el tren para todos en manos del Estado".
Micheli desmintió al Gobierno: "Dice que con ellos el Estado volvió a ocupar su rol histórico. Mentira, la tragedia ferroviaria de Once demostró una vez más un Estado ausente, si todavía hay gente que no sabe donde están sus familiares que viajaban en el Sarmiento. Este sistema está totalmente desfasado de la realidad" .
Y añadió: "En lugar de pagarle al Club de París, que usen nuestra plata para tener trenes donde se pueda viajar dignamente, se renueven maquinaria, coches y vías y se recupere el sistema ferroviario argentino que supo ser orgullo en Latinoamérica".
